Consideraciones del Comité Científico de la Fundación Oso de Asturias sobre el incidente ocurrido el pasado 30 de mayo en Cangas del Narcea (Asturias) con un oso pardo
El Comité Científico ha elaborado un documento con algunas reflexiones a raíz del incidente
25 de junio de 2021
1. Esperar y desear la pronta recuperación de la mujer herida, que ya se encuentra dada de alta y en su casa, con el más afectuoso apoyo a ella, a sus familiares y personas cercanas.
2. Llamar, ante incidentes como el ocurrido, a la prudencia de todas las instituciones y entidades con responsabilidad social a la hora de valorar los hechos. Sin una adecuada información sobre lo sucedido, una interpretación apresurada puede contribuir a generar intranquilidad y confusión.
La profusa e impropia utilización de términos como “oso humanizado”, “acción agresiva”, “oso habituado”, “oso peligroso” u “oso problemático” construyen y prejuzgan un relato de lo ocurrido que no ayuda al conocimiento de las circunstancias habidas y al entendimiento por la sociedad de las causas de estos incidentes. Incluso el término “ataque”, que ha estado presente en prácticamente todos los titulares de noticias y comunicados, tiene una connotación ofensiva y pro-activa que no se ajusta al comportamiento re-activo, que todo indica ha rodeado este caso.
3. Aunque la información oficial disponible es limitada y muchos de los informes periciales y partes médicos tienen en estos momentos carácter reservado, sí podemos afirmar que nos encontramos ante un encuentro fortuito de un oso con la mujer, en una pequeña carretera local y de unos pocos segundos, y que en la huida, el animal la golpeó con una de sus manos, derribándola. Como consecuencia de ello la mujer sufrió heridas graves en la cara y, como resultado de la caída, la rotura de la cadera. El lugar donde se produjo el accidente está ubicado a unos 400 metros del pueblo de Sonande, habitado por unas 30 personas y de donde es originaria la mujer accidentada y no por tanto en un núcleo habitado, y ni siquiera en sus inmediaciones.
4. Subrayar que estos incidentes son extremadamente raros y excepcionales. Este sería el octavo ocurrido en la Cordillera Cantábrica con la población de osos en las tres últimas décadas y el primero en Asturias.
5. Se estima que es necesario avanzar en el conocimiento de estos casos, las condiciones y características de los osos implicados y el comportamiento del animal y de las personas involucradas. Si bien el razonamiento de que más osos pueden causar más incidentes como el ocurrido es sencillo, la realidad es más compleja, como así lo atestiguan las investigaciones realizadas sobre este tipo de accidentes en todo el mundo. Ni siquiera en este caso, como en todos los ocurridos en las últimas décadas en la Cordillera Cantábrica, se puede hablar de un suceso en los alrededores de un núcleo habitado y que esté relacionado con la cercanía de los osos a los pueblos.
6. La excepcionalidad de estos incidentes no evita el impacto social que ocasionan y que no puede ser desatendido por los responsables de las políticas de conservación de la especie, especialmente en lo que a campañas informativas se refiere. Queremos recordar aquí las recomendaciones que desde la FOA se han hecho en caso de encuentro cercano de osos y personas (http://www.osodeasturias.es/actualidad/que-hacer-ante-la-presencia-de-un-oso/) y a la que animamos a reforzar estas acciones educativas contribuyendo así a mejorar la convivencia y tolerancia social con estos magníficos animales.
Forman parte del comité científico de la FOA:
· Javier Naves, investigador de la Estación Biológica de Doñana (CSIC).
· Juan Eugenio Ramos, geólogo y profesor de Educación Secundaria.
· Ana Balseiro, licenciada en Veterinaria y profesora e investigadora del Departamento de Sanidad Animal de la Universidad de León.
· Joaquín Lorences, Profesor Emérito Honorífico de la Universidad de Oviedo y Catedrático de Fundamentos del Análisis Económico.
· Paola Laiolo, doctora en Biología. Investigadora del CSIC en la Unidad Mixta de Investigación en Biodiversidad, de la que es directora.
· Nicanor Fernández, presidente de la FOA.
· José Tuñón, director de la FOA
25 de junio de 2021
1. Esperar y desear la pronta recuperación de la mujer herida, que ya se encuentra dada de alta y en su casa, con el más afectuoso apoyo a ella, a sus familiares y personas cercanas.
2. Llamar, ante incidentes como el ocurrido, a la prudencia de todas las instituciones y entidades con responsabilidad social a la hora de valorar los hechos. Sin una adecuada información sobre lo sucedido, una interpretación apresurada puede contribuir a generar intranquilidad y confusión.
La profusa e impropia utilización de términos como “oso humanizado”, “acción agresiva”, “oso habituado”, “oso peligroso” u “oso problemático” construyen y prejuzgan un relato de lo ocurrido que no ayuda al conocimiento de las circunstancias habidas y al entendimiento por la sociedad de las causas de estos incidentes. Incluso el término “ataque”, que ha estado presente en prácticamente todos los titulares de noticias y comunicados, tiene una connotación ofensiva y pro-activa que no se ajusta al comportamiento re-activo, que todo indica ha rodeado este caso.
3. Aunque la información oficial disponible es limitada y muchos de los informes periciales y partes médicos tienen en estos momentos carácter reservado, sí podemos afirmar que nos encontramos ante un encuentro fortuito de un oso con la mujer, en una pequeña carretera local y de unos pocos segundos, y que en la huida, el animal la golpeó con una de sus manos, derribándola. Como consecuencia de ello la mujer sufrió heridas graves en la cara y, como resultado de la caída, la rotura de la cadera. El lugar donde se produjo el accidente está ubicado a unos 400 metros del pueblo de Sonande, habitado por unas 30 personas y de donde es originaria la mujer accidentada y no por tanto en un núcleo habitado, y ni siquiera en sus inmediaciones.
4. Subrayar que estos incidentes son extremadamente raros y excepcionales. Este sería el octavo ocurrido en la Cordillera Cantábrica con la población de osos en las tres últimas décadas y el primero en Asturias.
5. Se estima que es necesario avanzar en el conocimiento de estos casos, las condiciones y características de los osos implicados y el comportamiento del animal y de las personas involucradas. Si bien el razonamiento de que más osos pueden causar más incidentes como el ocurrido es sencillo, la realidad es más compleja, como así lo atestiguan las investigaciones realizadas sobre este tipo de accidentes en todo el mundo. Ni siquiera en este caso, como en todos los ocurridos en las últimas décadas en la Cordillera Cantábrica, se puede hablar de un suceso en los alrededores de un núcleo habitado y que esté relacionado con la cercanía de los osos a los pueblos.
6. La excepcionalidad de estos incidentes no evita el impacto social que ocasionan y que no puede ser desatendido por los responsables de las políticas de conservación de la especie, especialmente en lo que a campañas informativas se refiere. Queremos recordar aquí las recomendaciones que desde la FOA se han hecho en caso de encuentro cercano de osos y personas (http://www.osodeasturias.es/actualidad/que-hacer-ante-la-presencia-de-un-oso/) y a la que animamos a reforzar estas acciones educativas contribuyendo así a mejorar la convivencia y tolerancia social con estos magníficos animales.
Forman parte del comité científico de la FOA:
· Javier Naves, investigador de la Estación Biológica de Doñana (CSIC).
· Juan Eugenio Ramos, geólogo y profesor de Educación Secundaria.
· Ana Balseiro, licenciada en Veterinaria y profesora e investigadora del Departamento de Sanidad Animal de la Universidad de León.
· Joaquín Lorences, Profesor Emérito Honorífico de la Universidad de Oviedo y Catedrático de Fundamentos del Análisis Económico.
· Paola Laiolo, doctora en Biología. Investigadora del CSIC en la Unidad Mixta de Investigación en Biodiversidad, de la que es directora.
· Nicanor Fernández, presidente de la FOA.
· José Tuñón, director de la FOA
