Los informadores ambientales asesoraron a más de 2.200 turistas entre julio y septiembre

Un 33% de los visitantes de los cercados oseros procedía de Madrid y hasta un 5% de los observadores encuestados era extranjero

El programa de informadores ambientales que la FOA tiene en marcha desde hace tres veranos ha concluido en septiembre tras haber asesorado a más de 2.200 turistas. Esta última campaña, que se ha desarrollado en un contexto de incertidumbre debido a la COVID-19, ha finalizado con un importante incremento del número de visitantes que se han decantado por realizar turismo de naturaleza, lo que a su vez pone de relieve la importancia de llevar a cabo este tipo de iniciativas que tienen como principal objetivo concienciar a la población sobre la importancia de mantener buenas prácticas en los entornos naturales.

Para analizar el perfil de los encuestados, se han dividido, en primer lugar, en función de si realizaban turismo de avistamiento, si estaban visitando los cercados oseros o si eran senderistas ocasionales. En el caso de estos últimos, un 25% procedía de Asturias, un dato elevado que ha crecido un 12% respecto al año anterior. La cifra contrasta con los visitantes a los cercados, ya que hasta un 33% eran madrileños, frente al 16% de asturianos. Por su parte, los observadores eran, en su mayoría, de Madrid y Galicia (un 18% en cada caso).

La incidencia de la pandemia también se ha notado en un importante descenso del número de extranjeros que visitaron los entornos naturales analizados. En cualquier caso, no deja de ser significativo en este contexto que hasta un 5% de los observadores encuestados procedía de otros países europeos.

Durante casi tres meses, los informadores ambientales han recorrido multitud de espacios naturales, en especial dentro de los parques naturales de Somiedo y Ubiñas – La Mesa y otros enclaves de los Valles del Oso, como la ruta de las Xanas, o los cercados oseros. La labor se llevó a cabo durante todo el verano, si bien se hizo especial incidencia en fines de semana, días de mejor previsión climatológica, festivos y puentes, con el objetivo de poder llegar al mayor porcentaje de visitantes posible.

En sus recorridos, los informadores se desplazaron en coches 100% eléctricos, cedidos por el Grupo Baldajos, para los que se utilizaron los puntos de recarga de EDP. Ambas entidades -en el caso de EPD a través de su fundación- son las que han hecho posible que este proyecto se llevara a cabo.

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