Tiempos difíciles
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08 de abril de 2020
Para todos. Vivimos una situación a la que nadie es ajeno y a la que todos debemos contribuir, desde la mayor responsabilidad, a que se supere cuanto antes y con el menor dolor posible.
Desde la FOA deseamos que así sea, y lo hacemos de manera especial a través de estas líneas que, aunque tienen por destinatarios a nuestros amigos y seguidores, contienen el firme deseo de que toda la sociedad pueda volver a disfrutar de la mayor seguridad y bienestar.
Nuestra aportación a este objetivo es limitada, pero no por ello dejamos de asumirla con el rigor y los medios que están a nuestro alcance.
Nuestro personal y colaboradores más cercanos han adoptado las medidas acordes con la situación en aras a minimizar riesgos y asegurar, hasta donde es razonable, el cumplimiento de sus cometidos, entre el que no es el menor velar por los ejemplares a nuestro cargo y que no entienden de circunstancias especiales como las que sufrimos.
Se ha fortalecido el trabajo digital – especial mención merece el Centro de Documentación puesto en marcha – y se ha aplazado toda la programación del trimestre en materia de educación ambiental que es, como se sabe, uno de los ejes prioritarios de actividad. Por supuesto la Casa del Oso permanece cerrada al público en tanto y cuanto no se reviertan las condiciones que lo hicieron aconsejable.
Ojalá todo esto pase pronto y podamos retomar la actividad normal cuanto antes, pero mientras llega ese momento, y para contribuir a que sea tan rápido como deseamos, ahora es el momento de la mayor responsabilidad. Así lo entendemos en la FOA, desde donde os hacemos llegar los mejores deseos.
08 de abril de 2020
Para todos. Vivimos una situación a la que nadie es ajeno y a la que todos debemos contribuir, desde la mayor responsabilidad, a que se supere cuanto antes y con el menor dolor posible.
Desde la FOA deseamos que así sea, y lo hacemos de manera especial a través de estas líneas que, aunque tienen por destinatarios a nuestros amigos y seguidores, contienen el firme deseo de que toda la sociedad pueda volver a disfrutar de la mayor seguridad y bienestar.
Nuestra aportación a este objetivo es limitada, pero no por ello dejamos de asumirla con el rigor y los medios que están a nuestro alcance.
Nuestro personal y colaboradores más cercanos han adoptado las medidas acordes con la situación en aras a minimizar riesgos y asegurar, hasta donde es razonable, el cumplimiento de sus cometidos, entre el que no es el menor velar por los ejemplares a nuestro cargo y que no entienden de circunstancias especiales como las que sufrimos.
Se ha fortalecido el trabajo digital – especial mención merece el Centro de Documentación puesto en marcha – y se ha aplazado toda la programación del trimestre en materia de educación ambiental que es, como se sabe, uno de los ejes prioritarios de actividad. Por supuesto la Casa del Oso permanece cerrada al público en tanto y cuanto no se reviertan las condiciones que lo hicieron aconsejable.
Ojalá todo esto pase pronto y podamos retomar la actividad normal cuanto antes, pero mientras llega ese momento, y para contribuir a que sea tan rápido como deseamos, ahora es el momento de la mayor responsabilidad. Así lo entendemos en la FOA, desde donde os hacemos llegar los mejores deseos.
